Y podría confirmar que no solo el protagonista, si no también la serie en sí es digna de ser definida como algo completamente nuevo, con sus propias reglas. Mi crimen es, quizá, haberla visto sin antes haberme leído la novela original, "El oscuro pasajero" de Jeff Lindsay (crimen que reconozco haber cometido demasiadas veces con películas basadas en novelas). Sin embargo, este es uno de los casos en que uno se queda con ganas de leerse el libro al haber acabado de visionar sus ocho temporadas.
El protagonista que da nombre a la serie, Dexter Morgan, es en apariencia algo introvertido pero un tipo normal al fin y al cabo. Trabaja como forense y analizador de manchas de sangre para el apartamento de homicidios de la policía. Sin embargo Dexter Morgan tiene una cara oculta que responde a una especie de necesidad instintiva, que se ha ido desarrollando a partir del traumático hecho de haber sido testigo del brutal asesinato de su madre durante una infancia muy temprana.
Esa cara oculta, que se ha ido desarrollando de manera constructiva a partir del código de su padre, no solamente esconde su falta o dificultad para empatizar, si no también su faceta de asesino en serie. Eso sí, no un asesino en serie cualquiera, si no un asesino de asesinos, de los cuales algunos han escapado de la ley y otros son perseguidos por la misma.
¿Por qué recomiendo Dexter? Pues no solo brilla por su argumento, hay muchos aspectos que hacen especial esta serie.
El aspecto psicológico es uno de los puntos fuertes de la serie, pues Dexter no solo se nos presenta como la interpretación de una persona normal adaptada a la sociedad que oculta su cara criminal, si no que también nos introduce en sus propios pensamientos y reflexiones, de modo que todos sus actos tienen su "por qué", desde su obsesión y fascinación por la sangre hasta sus rituales homicidas, que se prepara minuciosamente y habiéndose informado lo suficiente sobre sus víctimas. El propio Dexter nos introduce en su idea equivocada de que es incapaz de sentir emociones y que no tiene consciencia, sin embargo nosotros mismos, a lo largo de la serie, a través del sentido común somos testigos de que dicha idea no es más que la imposición de unas barreras psicológicas que han ido fortaleciéndose debido a una serie de vivencias y circunstancias, que nacen de ese trauma que fue el brutal asesinato de su madre. No obstante, durante ocho temporadas que dura la serie también vemos cierto desarrollo psicológico e intelectual, que va de un Dexter frío e individualista a uno con más empatía, emociones visibles y responsabilidades.
Otro aspecto es que pese a lo oscuro del argumento no todo es lúgubre y gris. El humor juega un papel importante en la serie, así como su constante banda sonora de raíces latinas, que nos sugiere cual es el ambiente de algunas de las zonas de Miami, aspectos que la hacen más fresca y ligera. Claro que, se trata de una serie de esas que se va volviendo cada vez más dramática mediante avanza, cosa que también atrapa eficazmente al espectador.
Audiovisualmente tiene una calidad fotográfica muy buena y cada detalle está muy cuidado. Las interpretaciones tampoco defraudan.
Pero lo que más me ha gustado es que me ha enganchado casi por igual en sus ocho temporadas, cosa que no muchas series consiguen. Cada temporada ofrece una perspectiva diferente a la anterior, y de ese modo no cae en la monotonía. La que pondría por debajo a las demás es la octava, simplemente por algunas incoherencias y por una pérdida notable del ritmo, sin embargo no por eso destruye ni echa a perder radicalmente el resto de la serie.
En fin para quien no la haya visto y antes de empezar con el análisis, os dejo la intro, artísticamente muy currada.
Otro aspecto es que pese a lo oscuro del argumento no todo es lúgubre y gris. El humor juega un papel importante en la serie, así como su constante banda sonora de raíces latinas, que nos sugiere cual es el ambiente de algunas de las zonas de Miami, aspectos que la hacen más fresca y ligera. Claro que, se trata de una serie de esas que se va volviendo cada vez más dramática mediante avanza, cosa que también atrapa eficazmente al espectador.
Audiovisualmente tiene una calidad fotográfica muy buena y cada detalle está muy cuidado. Las interpretaciones tampoco defraudan.
Pero lo que más me ha gustado es que me ha enganchado casi por igual en sus ocho temporadas, cosa que no muchas series consiguen. Cada temporada ofrece una perspectiva diferente a la anterior, y de ese modo no cae en la monotonía. La que pondría por debajo a las demás es la octava, simplemente por algunas incoherencias y por una pérdida notable del ritmo, sin embargo no por eso destruye ni echa a perder radicalmente el resto de la serie.
En fin para quien no la haya visto y antes de empezar con el análisis, os dejo la intro, artísticamente muy currada.
También añado un vídeo que nos presenta escenas de la sexta temporada (sin Spoilers, a parte de uno pequeño que es ciertamente muy poco relevante), que puede servir de crítica y sátira de la religión y aquellos que argumentan la existencia de Dios, el Cielo y el Infierno sin aplicar la lógica y el sentido común. Simplemente muy bueno.
ANÁLISIS (Con Spoilers)
Empezamos con una primera temporada que podríamos llamar la temporada del asesino del hielo. Aquí aprovechamos para conocer a Dexter y su entorno laboral, su peculiar y mal hablada hermana adoptiva Debra Morgan, sus superiores y compañeros de trabajo, y su novia Rita, quien es madre de dos hijos de su ex marido Paul (Mark Pellegrino, quien interpretó a Jacob en Lost).
El Dexter más frío lo vemos aquí, y lo que supone un duelo épico entre hermanos, gran papel por cierto el de Christian Camargo interpretando a Brian Moser.
Una frase: Un bonito y soleado día en Miami, cuerpos mutilados con probabilidad de chubascos por la tarde.
La primera temporada es muy buena, aunque argumentalmente parece una simple excusa para presentarnos a Dexter y su entorno. Es en la temporada del asesino de la bahía donde empiezan los verdaderos conflictos de la serie, y nos engancha de una manera diferente. hasta ahora. Pues vemos a un Dexter algo más apurado, tratando de boicotear un caso policial de homicidios que es nada más y nada menos que obra suya.
Personajes de importancia en esta temporada son el sargento James Doakes, el agente especial del FBI Frank Lundy y la manipuladora Laila West, quien desde el principio transmite mala espina.
Una frase: Es extraño tener una creación ahí fuera… una profundamente mutada versión de ti mismo, suelta por ahí, jodiéndolo todo. Me pregunto si así es como se sienten los padres…
La tercera temporada podríamos catalogarla como la temporada del despellejador, aunque en este caso se le da más importancia a la trama de los hermanos Prado. Esta temporada tarda un poco en arrancar, pero a mí me pareció especialmente buena. Dexter intentando confiar en alguien (Miguel Prado) para compartir sus rituales homicidas es lo que le da chispa. Otro personaje que se incorpora para acompañarnos durante el resto de la serie es el nuevo compañero de Deb, Joey Quinn. Esta temporada acaba bastante bien, sin cabos sueltos que atar, pero nos transmite que se avecina una tormenta después de la calma.
Una frase: Justo cuando crees haber respondido todas las preguntas otra te golpea la cara. La vida es eso, por eso yo prefiero la muerte.
En la temporada del asesino Trinity se nos presenta a uno de los asesinos en serie más enfermizos de la serie. Mientras la nueva faceta de Dexter como padre, no sabiendo muy bien como compaginarla con la de asesino.
Destacar una gran interpretación, que es la de John Arthur Lithgow como Arthur Mitchell, o Trinity. El final de esta temporada supone uno de los más dramáticos de la serie, con la muerte de Rita, viendo Dexter su propio recuerdo al ver a su hijo rodeado de su sangre.
Una frase: ¿Esto es lo que hacen los humanos? ¿Hablar, decir lo que piensan? ¿En voz alta?
La temporada de Jordan Chase arranca con gran cantidad de personajes nuevos. Entre ellos el agente Liddy (Peter Weller, quien encarnó a Robocop en su momento), quien investiga a Dexter cuando Quinn empieza a sospechar de él. El caso de esta temporada gira entorno a los acosadores de la víctima de brutales torturas y violaciones, y testigo de otros asesinatos Lumen Pierce, quien se convertirá en compañera y amante de Dexter. Esta temporada es bastante enrevesada, pero no por eso menos interesante.
Una frase: Tic-tac, tic-tac... es el sonido de tu vida que se agota.
El gran análisis religioso llega con la temporada del asesino del Juicio Final. Los primeros capítulos nos muestran una peculiar sátira sobre la religión, el cielo, el infierno y el típico argumento exento de lógica y sentido común para probar que todo eso existe.
Los asesinatos aquí presentados tienen una sorprendente puesta en escena, caracterizados todos por algún hecho bíblico. Personaje interesante pero que lamentablemente dura poco es el padre Sam, interpretado por el rapero Mos Def.
El final de esta temporada es gratamente sorprendente.
Una frase: Los lobos vienen en formas diferentes. Algunos tienen grandes ojos para verte mejor, otros resoplan... y otros se esconden a plena vista. Yo debería saberlo, porque en cierto modo, soy uno de ellos.
Una frase: Todo en lo que puedes creer está en el ahora, en este preciso momento.
No tengo muy claro como llamaría la última temporada, pero quizá la temporada de la dra. Vogel, la auténtica creadora del código de Harry, y quien le conoce mejor que nadie. La sensación que nos da esta temporada es una clara pérdida del ritmo que hasta ahora tenía la serie. A pesar de eso, nos aporta la aparición de un nuevo asesino, el cual podría recordar ligeramente al joven Norman Bates de Psicosis.
Una frase: Todo contacto deja un rastro. Todos y todo lo que tocamos cambia de alguna manera pero los cambios nunca son lo que esperamos.
El final, puedo entender que fuera decepcionante para muchos. Sin embargo, a mí no me pareció tan malo como muchos me lo pintaban. No falta la lógica y el sentido común. Dexter perdió a su padre, a Rita, a Vogel, y por último a su hermana Debra; y todo consecuente a su oscuro pasajero. Es ahí donde Dexter reacciona, cuando pierde a su hermana, y toma la decisión de abandonar a los únicos seres queridos que le quedan, Hanna McKay y su hijo Harrison, únicamente para protegerles y no perderlos dramáticamente. No es el mejor final, pero al menos todo queda bastante claro.
En cuanto al rumor de un posible spin-off lo dudo bastante. Aunque una buena temática sería uno títulado "las novias de Dexter", de las que realmente sabemos muy poco. Quizá Rita es la única de la que conocemos lo suficiente.
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